Creación de Christian Gutiérrez, alias Christiano, este personaje poblacional surgió en un fanzine (revistas de aficionados) llamado Barrio Sur, que en 1989 era editado en fotocopias y repartido de mano en mano o a través de algunas librerías de Santiago.
Barrio Sur, realizada por Gutiérrez junto a los hermanos Miguel y Rodrigo Higueras, era una de las tantas publicaciones artesanales en que germinó la historieta nacional de la última década, la cual poco a poco a ido ganándose espacios y conquistando más adeptos de todas las edades.
Desde entonces, tras el fanzine Barrio Sur, Pato Lliro tuvo otras tres revistas propias, aunque siempre artesanales: Crónicas del Barrio Sur (1993); Saltando Paredes, Pateando Piedras (1995) y una recopilación de historias inéditas (1996). Eso, además de una revista en formato horizontal que mostraba las aventuras en solitario del perro del Pato Lliro: El Quiltro.
Christian Gutiérrez, Christiano, confiesa que su afición por la historieta surgió desde muy temprano, incluso antes de aprender a leer, a los 4 años, hacía sus primeros comics. Partió influenciado por las revistas que a principios de los 70 publicaba la Editorial Quimantú, como La Chiva o Cabro Chico. Más adelante, la influencia de Mampato, las revistas de Superman o Batman que llegaban de México y las revistas argentinas como D'Artagnan o El Tony, con sus cómics para adultos,confirmaron la vocación de este dibujante.
Con estudios de diseño gráfico, Christiano encontró en el guionista Miguel Higueras (Sicario, Medianoche) al que conoció en el colegio, un cómplice ideal para sus primeras incursiones en la historieta. Ahora,autor del texto y los dibujos, Christiano hace un paralelo entre su personaje y el cómic chileno de los últimos diez años: "Creo que de alguna manera el Pato Lliro es emblemático de la evolución que ha tenido la historieta, pasando de un cosa marginal a convertirse en algo más profesional y que ha ido ganando más público".
Después de diez años de deambular en fanzines y autoediciones, el lunes 15 de marzo de 1999 el Centro Cultural de España (Providencia 927), la la editorial de comics Dédalos lanza Pato Lliro: Recuerdos de Cabro Chico, por primera vez como una revista formal.
Así, con portada en color e impresión digital, la publicación narra las aventuras infantiles de este personaje marginal del comic chileno.
Según explica el propio Christiano, Pato Lliro nació como una respuesta a los personajes marginales del cómic de esos años en revistas como Trauko. "Me parecía que esas revistas dibujaban una marginalidad por opción, un modelo foráneo, y surgió la idea de cómo sería un verdadero marginal chileno. La respuesta: sería un cuma, un pato malo".
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